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- Author, Antoinette Radford
- Role, BBC News
Un ataque ruso contra la localidad de Groza, al sureste de Járkiv, causó la muerte de al menos 51 personas, entre ellas un niño de seis años.
Las víctimas estaban asistiendo al velatorio de un residente cuando un misil impactó a las 13:15 hora local.
El Ministerio de Defensa ucraniano declaró que no había objetivos militares en la zona, sólo civiles.
El jefe regional de Járkiv, Oleh Synyehubov, describió el ataque como uno de los “crímenes más sangrientos” en la región.
Confirmó que todos los que murieron eran residentes de la aldea, que en 2020 tenía una población de unas 501 personas. Eso significa que el bombardeo de mató al 10% de su población.
“Había gente presente de todas las familias, de todos los hogares”, declaró el ministro del Interior ucraniano, Ihor Klymenko.
El distrito de Kúpiansk -del que forma parte el pueblo- ha estado en primera línea de los enfrentamientos entre los ejércitos ruso y ucraniano, desde que Vladimir Putin lanzó su invasión a gran escala en febrero del año pasado.
Al principio de la guerra era un importante centro de abastecimiento para las fuerzas rusas, pero Kyiv lo reconquistó en septiembre de 2022 tras meses de combates.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, calificó el ataque como un “brutal crimen ruso”.
“Rusia necesita este y otros ataques terroristas similares para una sola cosa: hacer de su agresión genocida una nueva norma para el mundo”, dijo en Telegram.
Fuente de la imagen, Getty
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, calificó el ataque como un “brutal crimen ruso”.
“Europa no puede sustituir a EE. UU.”
El ministro del Interior aseguró que se utilizó un misil Iskander en el ataque, pero la BBC no ha podido verificar de forma independiente esta afirmación.
Rusia atacó la localidad mientras Zelensky asistía a la cumbre de líderes europeos en Granada (España).
Allí, el responsable de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, advirtió que las luchas políticas internas estaban amenazando la capacidad de Estados Unidos para financiar al ejército ucraniano.
Un reciente acuerdo presupuestario en el Congreso estadounidense no incluía financiamiento para Ucrania.
Borrell afirmó que ningún país europeo podría llenar el vacío dejado por la pérdida de apoyo estadounidense.
“¿Puede Europa llenar el vacío dejado por Estados Unidos? Desde luego, Europa no puede sustituir a Estados Unidos”, afirmó.
El jueves, Zelensky pidió a los líderes europeos más misiles de defensa antiaérea y agregó que otros países podían agradecer a Ucrania que les protegiera de la agresión rusa.
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