Durante los últimos 800.000 años, la Tierra ha fluctuado entre eras glaciales y periodos interglaciares aproximadamente cada 100.000 años.
Hace unos 100.000 años, los primeros humanos anatómicamente modernos emigraron de África en masa. Eran muy hábiles adaptándose a nuevos hábitats y se asentaron en prácticamente todo tipo de paisajes, desde desiertos a selvas.
Parte del éxito se debió a la capacidad de esos humanos para cazar grandes animales. Con ingeniosas técnicas de caza y armas especialmente construidas, perfeccionaron el arte de matar incluso a los mamíferos más peligrosos.
Se sabe que numerosas especies de gran tamaño corporal se extinguieron durante la época de la colonización mundial por los humanos anatómicamente modernos.
Ahora, un nuevo estudio, realizado por el equipo de Juraj Bergman de la Universidad de Aarhus en Dinamarca, revela que aquellos grandes mamíferos que sobrevivieron, también experimentaron un dramático declive.
Se viene debatiendo desde hace décadas a qué se debe la extinción o el rápido declive de los grandes mamíferos en los últimos 50.000 años.
Por un lado están los científicos que creen que las rápidas y graves fluctuaciones del clima son la principal explicación. Por ejemplo, creen que el mamut lanudo se extinguió porque la fría estepa de los mamuts desapareció en gran medida.
En el lado opuesto hay un grupo que cree que la proliferación de los humanos anatómicamente modernos (Homo sapiens) es la explicación. Creen que nuestros antepasados cazaron a los animales hasta tal punto que se extinguieron por completo o quedaron gravemente diezmados.
Los resultados del nuevo estudio indican que la segunda teoría es la correcta.
Gente prehistórica atacando a un elefante. El nuevo estudio demuestra que fueron los humanos, y no el clima, los causantes del brusco declive de casi toda la megafauna de la Tierra hace 50.000 años. (Ilustración: E. Bayard. Primera impresión: Bryant & Gay, 1883)
Los investigadores estudiaron la evolución de las poblaciones de grandes mamíferos en los últimos 750.000 años. Durante los primeros 700.000 años, las poblaciones fueron bastante estables, pero hace 50.000 años la curva se rompió y las poblaciones cayeron drásticamente y nunca se recuperaron.
Teniendo en cuenta que, durante los últimos 800.000 años, la Tierra ha fluctuado entre eras glaciales y periodos interglaciares aproximadamente cada 100.000 años, si el clima fuera la causa de la extinción o reducción de las poblaciones de grandes mamíferos, deberían apreciarse mayores fluctuaciones cuando el clima cambió antes de hace 50.000 años. Pero los autores del estudio no hallaron nada de eso. Los humanos somos, por tanto, la causa más probable.
El estudio se titula “Worldwide Late Pleistocene and Early Holocene population declines in extant megafauna are associated with Homo sapiens expansion rather than climate change”. Y se ha publicado en la revista académica Nature Communications. (Fuente: NCYT de Amazings)