Las tres personas fallecidas este jueves en los accidentes múltiples de tráfico registrados en la A-4 a la altura de Santa Cruz de Mudela (Ciudad Real) han sido identificadas como aficionados del Sevilla que viajaban a Madrid para presenciar el partido de cuartos de final de la Copa del Rey que disputa esta noche contra el Atlético de Madrid, en el estadio Cívitas Metropolitano.
Se trata de un padre y un hijo, mientras que de la tercera persona no ha trascendido su identidad, todos ellos naturales de Morón de la Frontera (Sevilla), según ha confirmado el teniente alcalde del Ayuntamiento de la localidad, Ignacio Cala, quien ha dicho que existe consternación en este pueblo por lo ocurrido.
El Sevilla, por su parte, ha emitido un comunicado en redes sociales: “El Sevilla FC lamenta profundamente el fallecimiento de tres aficionados sevillistas, que han perdido la vida esta mañana, a la altura del paso de Despeñaperros, al sufrir un accidente de tráfico cuando se desplazaban a Madrid para presenciar el partido de esta noche en el Metropolitano. El club quiere estar con sus familiares y allegados en estos difíciles momentos. En su recuerdo, los jugadores portarán brazalete negro. Además, se ha solicitado a la RFEF un minuto de silencio justo antes del pitido inicial. Descansen en paz”.
Los accidentes han ocurrido en la autovía A-4, a la altura de Santa Cruz de Mudela (Ciudad Real), en una zona de niebla muy densa, y han generado además otros 18 heridos de diversa consideración, tres de ellos graves. Uno de los tres heridos graves aún no ha podido ser trasladado a ningún centro hospitalario porque se encuentra atrapado, mientras que los otros dos han sido enviados a los hospitales de Ciudad Real y Albacete, respectivamente. La autovía ha tenido que ser cortada en ambos sentidos.