Las estrellas variables nos brindan una ventana única para comprender los procesos fundamentales que ocurren en el cosmos. Desde estrellas pulsantes hasta explosiones cataclísmicas, cada tipo de estrella variable tiene su propia historia que contar.
1. Estrellas Variables Intrínsecas
Las estrellas variables intrínsecas experimentan cambios en su brillo debido a procesos internos, como pulsaciones o cambios en su estructura. Entre los tipos más destacados se encuentran:
· Estrellas Cefeidas: Estas estrellas experimentan pulsaciones regulares en su tamaño y luminosidad, lo que las convierte en valiosos “relojes estándar” para medir distancias cósmicas.
· Variables RR Lyrae: Son estrellas similares a las cefeidas pero más antiguas y menos masivas. También se utilizan como indicadores de distancia en la galaxia y más allá.
· Estrellas Eruptivas: Incluyen las variables tipo T Tauri y las estrellas FU Orionis, que experimentan erupciones repentinas de brillo debido a cambios en su formación estelar.
(Foto: NASA)
2. Estrellas Variables Externas
Las estrellas variables externas, por otro lado, experimentan cambios en su brillo debido a fenómenos externos, como eclipses o interacciones con compañeras estelares. Algunos ejemplos notables son:
· Estrellas Binarias Eclipsantes: Son sistemas estelares en los que una estrella pasa frente a la otra desde nuestra perspectiva en la Tierra, causando variaciones periódicas en el brillo total del sistema.
· Novas y Supernovas: Las novas son explosiones termonucleares en sistemas binarios donde una estrella enana blanca “roba” material de su compañera. Las supernovas, por otro lado, son explosiones cataclísmicas que marcan el final explosivo de la vida de una estrella masiva.
· Variables Cataclísmicas: Incluyen estrellas binarias que experimentan erupciones periódicas debido a transferencias de masa entre las componentes del sistema.
3. Estrellas Variables Extragalácticas
Por último, las estrellas variables extragalácticas son aquellas que se encuentran fuera de nuestra propia galaxia, la Vía Láctea. Entre ellas se encuentran las estrellas variables en cúmulos globulares de otras galaxias y las supernovas en galaxias distantes, que son cruciales para medir las distancias en el universo.