Además de sus paisajes desérticos y montañosos, una de las características más fascinantes de Marte es su amplio rango de temperaturas. Veamos cómo las condiciones climáticas en este planeta distante pueden oscilar desde el calor abrasador hasta el frío extremo.
Temperaturas Superiores: En los momentos más calurosos del día en Marte, especialmente en las regiones ecuatoriales, las temperaturas pueden elevarse a niveles sorprendentemente altos. Durante el verano marciano, la temperatura en estas áreas puede alcanzar hasta 20 grados Celsius o más en la superficie, aunque este calor se desvanece rápidamente con la llegada de la noche marciana.
Temperaturas Inferiores: Por otro lado, Marte también es conocido por sus temperaturas extremadamente frías, especialmente durante las noches marcianas y en las regiones polares. Durante el invierno, las temperaturas pueden descender a niveles helados, alcanzando mínimos de hasta -80 grados Celsius en la superficie. Estas temperaturas son lo suficientemente frías como para congelar dióxido de carbono y agua en forma de hielo seco y hielo de agua.
(Foto: USGS)
Variaciones Estacionales: Al igual que la Tierra, Marte experimenta cambios estacionales que afectan las temperaturas en todo el planeta. Durante el verano en el hemisferio sur marciano, el polo sur puede experimentar un deshielo parcial, mientras que en el invierno, el frío intenso puede extenderse por todo el planeta. Estas variaciones estacionales son el resultado de la inclinación del eje de Marte y su órbita elíptica alrededor del Sol.
Impacto en la Exploración Espacial: El conocimiento de las variaciones de temperatura en Marte es crucial para la exploración espacial y la planificación de misiones robóticas y humanas al planeta rojo. Las extremas fluctuaciones de temperatura pueden afectar al funcionamiento de los equipos y dispositivos enviados a Marte, lo que requiere diseños y materiales especiales para resistir tanto el calor como el frío extremo.