La empresa hongkonesa HGC Global Communications ha alertado esta semana de que han descubierto al menos cuatro cables submarinos del Mar Rojo que están cortados y que afectan directamente al tráfico mundial de internet, el problema es que hasta que no bajen a repararlo no se sabrá qué lo ha causado, pero ya existen varias teorías al respecto.
“De entre más de 15 cables submarinos en el mar Rojo, cuatro de ellos (Seacom, TGN, AAE-1, EIG) están cortados, lo que estimamos impacta en el 25 % del tráfico”, informó la empresa en un comunicado el pasado lunes.
Por el Mar Rojo pasan cientos de cables submarinos que impulsan las comunicaciones mediante internet, de hecho, más del 90% de las comunicaciones entre Europa y Asia pasan por cables submarinos en este mar, por lo que supone un canal importantísimo en la red global.
Por suerte, la compañía ha explicado que rápidamente se han puesto a mitigar los posibles daños diversificando el tráfico en el resto del sistema de 11 cables que quedan operativos en la zona. Esto ha llevado a que se recurra a conexiones a través de China continental y el Océano Pacífico hacia Estados Unidos, e incluso a la conexión mediante satélites.
El misterio detrás de la causa
“Nuestro equipo cree que es posible que [el cable] se haya visto afectado por el arrastre de anclas, debido a la cantidad de tráfico marítimo que enfrenta la región y al bajo lecho marino en muchas partes del Mar Rojo. Esto sólo podrá confirmarse una vez que el barco de reparación esté en el lugar de los hechos” explican desde Seacom, compañía gestora de uno de los cables afectados.
Pero hasta ese momento, siguen abiertas muchas opciones, por ejemplo, esta zona es donde intercambian ataques los rebeldes hutíes y la coalición internacional naval liderada por Estados Unidos, como parte del conflicto en la Franja de Gaza y de la guerra civil que se vive en Yemen.
En las últimas semanas, los hutíes han atacado a todo barco que consideran vinculados a Israel, además de que en diversos grupos de Telegram sugirieran sabotear esta infraestructura como parte de sus acciones contra la navegación comercial en el mar Rojo.
No obstante, los hutíes han negado toda responsabilidad, y de hecho, el pasado sábado, los rebeldes hutíes del Yemen acusaron a Estados Unidos y al Reino Unido de “provocar defectos” en la red de cables. Es por ello que hasta que no se baje y compruebe cómo se han cortado estos cables, no podremos saber qué ha ocurrido y quién es el responsable.
Lo que está claro es que hay una preocupación global por el estado de estos cables submarinos y su seguridad, ya que actualmente el 99% de todo el tráfico de datos digitales de todo el mundo, incluido Internet, se transporta por ellos.