En la actualidad, la comida rápida se ha convertido en un plato prácticamente impuesto por el ritmo de vida diario. La mayoría de personas no tienen tiempo suficiente para preparar un buen plato de comida que sea equilibrado. Además, el trabajo impide a muchas personas llevar un estilo de vida saludable: las largas horas de jornada laboral, el exceso de estrés y el agotamiento tanto físico como mental crean un monstruo ansioso que no muchos pueden controlar. Por todos estos motivos la solución más fácil es comer una hamburguesa grande acompañada de una bebida azucarada refrescante.
La comodidad de la vida actual también se ha interpuesto entre la dieta equilibrada y la salud en general. Al parecer, es mucho más fácil pedir comida a domicilio que pasar el rato necesario preparando un plato nutritivo. No es que esté mal hacerlo un par de veces al mes: lo malo es el exceso del consumo de comida rápida.
Comida rápida
La comida rápida también es conocida en algunos países de habla hispana como comida basura. Brinda un gusto exquisito al paladar que no se puede comparar con ningún otro tipo de alimento y mucho menos si se trata de alimentos saludables. Este sabor es el que genera el círculo vicioso: genera la sensación de querer mucho más, probar de nuevo, pedir otra ración, etc.
El consumo de la comida rápida tiene una alta demanda en la actualidad0. No obstante, aunque muchas personas en el mundo entero se unen cada día a un estilo de vida y de alimentación equilibrado, este problema aún no se ha erradicado en su totalidad sino que, al contrario, sigue creciendo. Si consumes comida rápida eres más propenso a padecer enfermedades severas y de alto riesgo como, por ejemplo, la obesidad, hipertensión, cáncer, enfermedades metabólicas, etc. Por falta de tiempo y también por cansancio, muchas personas prefieren llamar por teléfono y encargar comida rápida ya que existe toda una variedad a nuestro alcance: las hamburguesas, las pizzas, la pasta, etc. Pero lo que muchos preferirían no saber es que estos alimentos son calóricos, contienen sal y grasas en exceso, todo lo cual pone en riesgo la salud.
Entre las ventajas que puedes obtener de consumir comida rápida están:
- El buen sabor que puede ser un gusto cada cierto tiempo. Un par de veces al mes, por ejemplo, no hará daño a tu organismo.
- El ahorro de tiempo. Este es el factor que hace que la mayoría de las personas se inclinen a consumir este tipo de comida.
- La comida rápida se prepara e ingiere rápidamente: algunas de ellas ya vienen preparadas en sus envases y solo hace falta calentarlas.
- Es fácil de transportar a donde quiera que vayas.
Pero no te confíes. Si conviertes el consumo de comida rápida en un hábito, terminarás arriesgando tu salud. Comerla en exceso es el problema principal de todas las enfermedades que se desencadenan. A continuación, te detallamos las consecuencias que te ocasionará comer habitualmente este tipo de alimentos.
Consecuencias de comer en exceso comida rápida
La comida rápida tiene un alto contenido en calorías, grasas saturadas, edulcorantes, azúcares, conservantes, aditivos y demás sustancias que son altamente dañinas para el organismo. Las consecuencias de su consumo en exceso son:
- Degeneración celular: el consumo de comida rápida en exceso contribuye a la degeneración celular, lo que da origen al envejecimiento prematuro. La dermis no lleva a cabo un proceso de oxigenación adecuado debido a la cantidad de grasas y demás toxinas que se estancan, evitando el paso correcto de la sangre hacia los capilares superficiales. De esta manera, la piel envejece con mucha rapidez, hasta 10 veces más por día cada vez que ingieres alguno de esos alimentos.
- Psicológicos: aunque te resulte difícil de creer, la ingesta de comida rápida ocasiona problemas de tipo psicológico. Esto se debe al alto contenido de azúcar y grasas que pueden desencadenar en trastornos como, por ejemplo, problemas de concentración, ansiedad, nerviosismo, problemas en la comunicación o falta de la misma, depresión, frustración, individualismo, manías compulsivas, etc.
Si acostumbras a tus hijos a consumir comida rápida, éstos pueden llegar a crecer con mayor desequilibrio emocional, cambios en el comportamiento, déficit de atención o cambios temperamentales, entre otros. Lo ideal es que mantengas a tus hijos lejos de este tipo de alimentos y los orientes por un camino mucho más saludable.
- Vicio o adicción: el verdadero problema con la comida rápida y por el que es tan peligrosa para la salud en general es la adicción. Si eres prudente y comes solo un poco de patatas fritas o una hamburguesa y luego continúas con tu estilo de vida normal, notarás que no echas de menos este tipo de comida. Pero si todas las semanas acostumbras a tu cuerpo a consumir comida rápida no podrás evitar caer en el vicio de hacerlo constantemente.
La comida rápida estimula el cerebro, específicamente el centro del placer, razón por la cual la persona genera el comportamiento adictivo a ciertas comidas, similar a los efectos que surgen por el consumo de las drogas.
- Depresión: la comida rápida carece de nutrientes, no aporta ningún beneficio a la salud. Sus efectos placenteros son fugaces y la persona tienden a consumirla en exceso para sentirse bien por esos pequeños momentos. Quienes consumen comida rápida tienen 51% de probabilidad de padecer depresión, especialmente las mujeres entre los 18 y 30 años de edad.
- Muerte: el riesgo de padecer enfermedades coronarias aumenta significativamente si consumes en exceso comida rápida. Los problemas cardíacos son más notables y surge la obesidad, los problemas hormonales, los problemas metabólicos, la irritabilidad, enfermedades gastrointestinales, debilidad del sistema inmunológico, entre otros problemas que pueden ocasionar la muerte inmediata.
Evita creer en la publicidad. Borra todo eso de tu memoria y empieza a llevar una alimentación equilibrada, saludable y que aporte beneficios diarios a tu organismo para prevenir enfermedades.
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Fuentes de imágenes:
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