Los primeros días tras la colocación de una ortodoncia son cruciales para determinar su éxito. Suele suceder que pasan unos días hasta que te consigues habituar a llevar los brackets. Así, muchos especialistas suelen recomendar la toma de un analgésico o antiinflamatorio para aliviar esas molestias iniciales.
Dentro de los primeros cuidados, en el caso de la ortodoncia invisible lo más importante es respetar al máximo el tiempo del tratamiento. Es decir, que tienes que cumplir al pie de la letra con los tiempos de cambio de férulas y el tiempo mínimo que debes tenerlas puestas cada día. Si no respetas estos tiempos, puedes entorpecer el adecuado funcionamiento del tratamiento.
En caso de duda, lo más recomendable siempre es que consultes a tu especialista o profesional de confianza con el que hayas iniciado el tratamiento. Dicho especialista sabrá evaluar el estado de tu salud bucodental y diagnosticarte de la manera más adecuada. Esto, a su vez, asegura que obtengas los resultados que deseas.
Además de acudir a profesionales del sector para garantizar la mayor calidad y la salud de tus dientes y boca, hay una serie de factores a tener en cuenta durante el proceso. Estos factores o pautas incluyen aspectos como el cuidado adecuado de tu higiene bucodental, cumplir con las pautas médicas, mantener una dieta adecuada, u otras que te detallamos a continuación:
Evitar las molestias
Los primeros días de tu ortodoncia tendrás que lidiar con una serie de molestias que son normales hasta que acabes por acostumbrarte a los brackets. Puedes experimentar problemas de sensibilidad o pequeñas heridas en la boca. En este caso, conviene que consultes con tu dentista por si necesitas algún tipo de analgésico, para tratar estas molestias.
Normalmente, los profesionales en ortodoncia suelen recomendar el uso de cremas o pomadas para tratar estas pequeñas heridas. Pero también el uso de cera dental para suavizar el roce de los brackets. Sea cual sea el tratamiento, solo un profesional médico será el encargado de diagnosticarlo y pautar las posibles soluciones.
Cuidar tu higiene bucodental
Mantener tu boca sana es fundamental en líneas generales, pero si has recibido un tratamiento de ortodoncia se convierte en tu prioridad. Puedes hacerte con un irrigador bucal para mantener bien limpias las zonas de difícil acceso, además del buen cepillado. También debes mantener muy limpio tu cepillo de dientes, ya sea manual o eléctrico.
Cumple con los tiempos de cambio de férulas y tiempo mínimo de puestas diarias para que no te ocasiones heridas o mayores problemas. Este es otro de los aspectos más importantes para que tu ortodoncia se desarrolle con eficacia y consigas los resultados que esperas. La higiene y el cumplimiento de las pautas médicas es básico para ello.
Cuidar tu alimentación
Para que tu tratamiento de ortodoncia sea efectivo, deberás tener en cuenta también ciertas pautas de alimentación. Evita los alimentos duros y pegajosos y opta por alimentos blandos durante las primeras semanas. Limita el consumo de café, té y bebidas que puedan manchar tus dientes. Alimentos como los frutos secos, el chocolate no son nada recomendables principalmente por su dureza.
Los alimentos que requieran de una fuerza de masticación intensa podrían estropear los brackets. Por lo tanto, es mejor que lo evites al principio. Después de un tiempo y cuando ya te hayas acostumbrado a la ortodoncia, podrás comer de todo sin problema. Es solo cuestión de prevenir y tener algo de paciencia.
Respeta las revisiones
La frecuencia de las citas depende de cada tratamiento, por lo que es importante que respetes las revisiones que te hayan pautado. Los profesionales odontólogos pautarán un número concreto de revisiones imprescindibles para que el tratamiento sea efectivo. Durante dichas revisiones se procederá a cambiar y mantener la presión adecuada, entre otras cosas.
Si no tienes revisiones físicas, sino que las consultas son online, también debes asistir, puesto que son muy importantes para evaluar tus avances. Lo mismo si tienes que seguir una serie de instrucciones o contactos periódicos con el centro de ortodoncia. Seguir las pautas marcadas es básico si quieres que tu ortodoncia tenga buenos resultados.
Una vez seguidos todos los pasos y fases del tratamiento, y cuando ya este haya finalizado, lo más importante para evitar que los dientes vuelvan a su posición previa es llevar una férula retenedora. El profesional a cargo será quien te diga cuánto tiempo deberás llevarla. De esta manera habrás completado todo el proceso y alargado el resultado de tu ortodoncia.
Además de los retenedores, la higiene bucodental tiene que seguir formando parte de tu rutina diaria. Las visitas regulares a tu dentista también, así como el cuidado del estado de tu salud dental. Puede incluso que un blanqueamiento dental para aclarar el tono de tus dientes sea el toque final para dar a tu sonrisa la perfección que estás buscando.